VENECIA
(30/01-01/02)
30.01.2014.
Llegué a Venecia a las 8.24 de la mañana, y hasta las 11 no
llegamos al hotel. ¿Qué estuvimos haciendo? Perdernos por Venecia,
sin mapa, en busca de nuestro hotel, que no estaba para nada cerca…
Nos recomendaron subirnos en vaporetto pero en la estación del
vaporetto no te vendían los tickets. Así que estuvimos preguntando
por la Plaza San Marcos, y cuando, por fin llegamos allí, había
pasadizos elevados del suelo para que las personas pudieran caminar.
Estaba completamente inundada. No paraba de llover.
Descansamos en el
hotel hasta las 4 de la tarde, y salimos a ver Venecia.
Primero volvimos a
la plaza San Marcos, ya no estaba inundada, y entramos en la Basílica
de San Marcos. Vimos las tiendecitas de recuerdos, caminamos hasta el
puente Rialto.
Me llamó la
atención poder encontrar recuerdos a menos de un euro, cuando en
otros sitios cuestan sobre 3 o 4 euros.
Volvimos al hotel a
las 7 u 8 de la tarde, ducha, skype con mama y las niñas, y a
dormir.
31.01.2014.
Por fin una cama cómoda, y despertarnos sin prisas. Después de
desayunar y bajar a recepción, nos encontramos con la sorpresa de
que está la calle inundada, el agua cubría nuestros zapatos.
Subimos a la habitación por bolsas de plástico, y nos fuimos.
Obviamente solo aguanté unos pasos sin mojarme, luego, me empapé
mis calcetines y mis botitas de tenis.
Vimos la Iglesia de
Santa Maria de la Salute, y estuvimos andando-navegando por las
calles, cruzamos el puente de la Academia, y nos dirigimos al Mercado
de Venecia, al lado del puente Rialto.
En el mercado
encontramos 6 o 7 puestecitos pequeños de pescado, lo que más
abundaba eran ostras, boquerones y otro grande que parecía un rape.
También había verduras y frutas.
Fuimos en busca de
la Ferrovía, estación de trenes para comprar el billete para
Florencia, y nos perdimos un poco por las calles de Venecia, pero no
importa, siempre encuentras sitios que ver.
El problema aquí ha
sido el tiempo, no ha salido el sol ningún día y ha estado
lloviendo sin parar, nos hemos mojado los pies y un poco la ropa.
Me da un poco de
rabia que no me haya llevado la impresión que esperaba llevarme de
aquí, pero bueno, eso solo quiere decir, que tengo una repetición
de esta visita obligada algún día.
Buscando la estación
de autobuses, y andando mucho, nos volvimos en “People Mover” una
especie de tren, que conectaba la estación de buses con la de
trenes.
Volvimos por el
mismo camino, compramos pan en un supermercado, y volvimos al hotel a
cambiarnos los zapatos, pesaban los pies mucho, ya que estaban
chorreando de agua, casi al principio me quité mis calcetines y los
llevé en mi mano durante todo el día, y también hubo momentos en
los que me remangué el pantalón hacia arriba porque se me mojaba de
lo alto que llegaba el agua. A las 12 de la mañana mas o menos
empezó a bajar.
Las botas de agua
las venden a partir de 15 euros, y una especie de botas de plástico
que parecen que no aguantan mucho por 8 euros las más baratas que
encontramos. Y obviamente no la compré porque no le voy a dar uno
en otro lado, ya tengo las mías en Alemania.
Descansamos en el
hotel, almorzamos y a las 7 y media volvimos a salir para ver Venecia
de noche, aunque ya la habíamos visto el día anterior.
Buscamos el león
con alas tan famoso, pero hay muchos por la ciudad, y el más
importante es el que está en la plaza san Marcos.
Como siempre pasa en
todas las ciudades, las cosas mas bonitas están en obras… La
basílica de San Marcos estaba en obras, y no la iluminaban por la
noche…
Estuvimos casi una
hora buscando la Calle Varisco, la más estrecha de Venecia, 53 cm,
pero nadie la conocía.
Compramos en un
supermercado gel de baño y acondicionador para el pelo, y volvimos
de vuelta al hotel. Llegamos a las 10 de la noche asi, y ya me duché,
preparé la maleta para el dia siguiente, y a dormir.